Cada año, 250.000 personas visitan la plaza de toros de Sevilla. Sin embargo, la mayoría desconoce que, conectada directamente con el coso, pero inaccesible para el aficionado, se encuentra una casa solemne donde se reúnen los miembros de la Real Maestranza de Caballería de Sevilla. Por Fátima Uribarri 

Los maestrantes acceden al tendido por una azotea que conecta la sede de su corporación con la plaza de toros. Su institución es la dueña del ruedo sevillano y la custodia de sus secretos. Arañas de la Granja, alfombras de la Real Fábrica de Tapices; una biblioteca con incunables y especializada en heráldica, genealogía, nobiliaria, tauromaquia y arte ecuestre; una escalera de autoridades majestuosa.

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Así es la sede de la Real Maestranza de Caballería de Sevilla, la otra cara de la Maestranza, desconocida para muchos. Esta corporación, antigua y tradicional, es el motor de la plaza de toros de Sevilla. Cada año, 250.000 personas visitan el coso taurino sevillano, pero no se adentran en la hermandad que la sostiene. Le mostramos su casa, sus tradiciones y cometidos.

Uno de los fundadores de la Real Maestranza de Caballería fue el primer marqués de Algaba, antepasado de los Alba

A la Real Maestranza de Caballería de Sevilla pertenece un selecto grupo de miembros ahora son 250, pero el número no es fijo. Hay abogados, arquitectos, empresarios, aristócratas… No pagan cuotas ni perciben beneficios, y se comprometen a continuar la labor de mecenazgo y al mantenimiento de la plaza de toros.

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La agrupación que custodia obras de arte y archivos centenarios­ se mantiene a sí misma con el alquiler de la plaza de toros y la gestión de su patrimonio (es dueña de edificios colindantes). Su sede está adosada al coso taurino, y los maestrantes disfrutan de un palco propio, vecino al palco real. La casa de los maestrantes es un edificio solemne, construido a principios del siglo XIX, con capilla, un valioso archivo, un salón de baile majestuoso, salita de fumadores y un comedor impresionante donde se falla el Premio Cultura y Nobleza. Mecenazgo, obra social y coleccionismo

El ruedo más grande de España

Los maestrantes son los guardianes de la plaza de toros de Sevilla, el ruedo más grande de España (impresiona pisarlo) y de los más antiguos. en 2015 se cumplen 285 años desde que la Real Maestranza de Caballería decidió construir su propia plaza de toros en el Arenal.

El uniforme de gala lo utilizan los maestrantes en ceremonias especiales, como el día del Corpus o el de su boda. Con él se han casado aristócratas como los Alba

Los caballos fueron antes que los toros. el germen de la cofradía es una orden caballeresca del siglo XIII, la Hermandad de San Hermenegildo, creada para formar a combatientes ecuestres. Todavía se conservan en el museo de la plaza de toros lanzas y estandartes de aquellos ejercicios de equitación. Después se pasó a organizar torneos y a alancear toros y rejonearlos.

El escritorio del rey. El Hermano Mayor de la Real Maestranza de Caballería es el Rey. Este es su despacho, con una fotografía de Felipe VI que se sustituirá por su retrato, vestido con el uniforme de gala.

Con Carlos II nace la Hermandad de la Maestranza, en 1670, hace 345 años. Los festejos se celebraban en recintos rectangulares (como en las plazas mayores de los pueblos). Así fue la primera Maestranza: rectangular y de madera. En 1733 se derriba y se comienza otra, ovalada, la primera del mundo con esta forma: les convencieron las ruinas de Pompeya (los romanos utilizaron edificios con esa estructura) y el que así los toros no pueden acorralar a los toreros en las esquinas.

Calabozo y contaduría

Más de 120 años de obras se han necesitado para que la plaza tenga su aspecto actual. Todavía hay en la Maestranza un calabozo (inutilizado) donde se encerraba a espontáneos y alborotadores; un cuarto del puntillero; y una contaduría (en desuso), que es como una pequeña portería en donde se pagaba a los toreros y empleados. También se conserva la capilla de los toreros, con la Virgen de la Macarena, Nuestra Señora de los Reyes y Jesús del Gran Poder.

La puerta del Príncipe. Trayecto glorioso. La flanquean los matadores que han triunfado en el albero. Pepe Luis Vázquez lo ha hecho en 16 ocasiones.

En esta plaza, con aforo para 12.000 personas, hay rincones de difícil acceso para los profanos, como la Puerta del Príncipe, la de la gloria. En realidad es un túnel con dos portones: el que da a la calle es de madera; el que conecta con el albero es una reja preciosa, rescatada del convento Regina Angelorum. Por aquí ha salido 16 veces a hombros Pepe Luis Vázquez. La conocieron y soñaron toreros ‘de la casa’ como Curro Romero en la plaza sevillana durante 44 temporadas o Manolo Vázquez, que salió por la Puerta del Príncipe con más de 50 años y 30 de alternativa.

El retablo barroco, del siglo XVII, procede del antiguo convento Regina Angelorum

También Goya, Benlliure o Fortuny conocen la Maestranza. En su sala de exposiciones (dentro de la plaza) se muestran importantes obras, como los 33 grabados originales de la segunda edición de la serie dedicada a la tauromaquia por Fransico de Goya. Las curiosidades abundan. En el museo se conservan 6000 carteles, en seda y papel; otros realizados por artistas contemporáneos como Fernando Botero, Manolo Valdés o Miquel Barceló; abanicos; esculturas, trajes de torero. el de Gallito cuando tenía 14 años es diminuto, parece de juguete. Patios, establos o guarniciones para las mulillas, por un lado; salón de los espejos, tapices o el despacho del Hermano Mayor, con baldaquino, por otro.

Javier Benjumea, Teniente del Hermano Mayor de la Real Maestranza de Caballería, afirma «esta corporación está al servicio de la sociedad».

Son las dos Maestranzas: la de los antiguos caballeros, con el Rey como Hermano Mayor (ahora, Felipe VI) y una importante labor de mecenazgo y asistencia social; y la de los picaderos, rejoneadores, matadores o banderilleros (dos de ellos, Manolo Montoliú y Ramón Soto, son los últimos fallecidos tras haber sido corneados en la arena sevillana). Hay más contrastes. «Las instituciones antiguas tienden a desaparecer o a subsistir de subvenciones. No es nuestro caso», explica Javier Benjumea, el equivalente a consejero delegado de esta institución que conserva las tradiciones incluso en la terminología.

PARA SABER MÁS

Historia gráfica de la plaza de toros de Sevilla. Fundación Real Maestranza de Caballería de Sevilla.

Sevilla en su plaza de toros a través del archivo de ABC. ABC/Real Maestranza de Caballería de Sevilla.

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