A la caza de resistentes
Los alemanes utilizaron en Italia este receptor radiogonométrico para localizar las emisoras clandestinas. Lo transportaban en furgonetas a la búsqueda de señales de radio.
Tiempo para escapar
En Francia, los saboteadores usaban estas espoletas retardadoras. Les proporcionaban tiempo para huir antes de que explotaran sus bombas.
Esta pluma dispara
Parece una pluma estilo-gráfica, pero es una pistola del calibre 22 de un solo disparo. La inventaron en la OSS estadounidense en 1943.
Motocicleta portátil
La Welbike se plegaba, empaquetaba y lanzaba desde un paracaídas. Tenía una autonomía de 140 kilómetros a una velocidad de 48 por hora.
Lápices-arma o brújula
Algunos lápices se utilizaron como escondites para punzones; otros, como brújulas que funcionaban colocando un clip magnetizado sobre la punta.
Pies para los ingleses
Los agentes británicos que operaban en el sudeste asiático caminaban sobre estas suelas de goma para simular las huellas de los nativos.
Cuchillo de paracaidista
Cabía en el cuello de la camisa y su gancho afilado era perfecto para cortar las cuerdas del paracaídas si se enredaban y aprisionaban al paracaidista.
Mensajes con el té
La BBC colaba mensajes en clave (sobre todo en la publicidad) para los grupos de resistencia. Uno de los receptores más comunes era este MCR-1, diseñado para camuflarse en una caja de galletas.
Monedas afiladas
Estas monedas de francos franceses se trucaron para añadirles un filo con el que pinchar coches alemanes con rapidez y disimulo.
Una cámara en las cerillas
La compañía Eastman Kodak fabricó para los servicios secretos britá-nicos más de mil ejemplares de esta minicámara que se camuflaba dentro de cajas de cerillas.
Chupetes para el sabotaje
En el doble fondo de los carritos para bebés, la resistencia holandesa escondía material de sabotaje y una radio. Encima colocaban a un bebé real.
El violín del espía
La resistencia belga utilizó esta funda de violín como maletín de sabotaje con cable detonador, cuchillo y tabla para cortar mechas, alicates…
El libro, ‘La historia secreta de la Segunda Guerra Mundial’, recupera los curiosísimos objetos que los agentes secretos utilizaron durante la Segunda Guerra Mundial. F. U.
¿Qué escondían los espías bajo su gabardina?
Durante la Segunda Guerra Mundial, los agentes secretos de uno y otro bando utilizaron curiosos artilugios de espía para hacer su trabajo. Un nuevo libro rescata algunos de estos objetos…