En Indonesia, si no usas mascarilla, puedes acabar haciendo flexiones, cavando tumbas o limpiando cloacas. Por Fernando Goitia / Foto: GTRES

Con algunas personas solo sirve el castigo. La sentencia, tan repetida en esta pandemia, ha sido llevada a extremos extravagantes en Indonesia, el país del sudeste asiático con más muertes (cerca de 13.000) por coronavirus. El Gobierno de Yakarta ha dejado «al libre albedrío de la sabiduría local» el cumplimiento de las medidas de higiene y seguridad, y las autoridades de cada región se han puesto a aplicar castigos un tanto peculiares. O «degradantes», como los califica KontraS, un grupo local pro derechos humanos.

Es el país del sudeste asiático con mayor número de muertos

Además de las multas, dolorosas en un país con 4000 dólares de renta per cápita anual, al que no usa mascarilla en la vía pública -o la lleva en la barbilla o por debajo de la nariz- se lo obliga a hacer flexiones, meterse en un ataúd, cavar tumbas, limpiar cloacas y riberas, arrancar hierbas en los parques o correr un sprint de 800 metros a pleno sol… La imaginación (o ‘sabiduría’) de la autoridad local es el límite.

Foto apertura: infractores indonesios hacen flexiones en plena calle por violar la ley que obliga a usar mascarillas en la vía pública.

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